Garzón, el exótico
Conviene hacerle justicia al zagal Garzón, de oficio aún ministro, porque no acierta una, pero pone mucho entretenimiento de inocentón a su aire, en un panorama, la política, donde prosperan los matarifes de la solemnidad, o el tedio. De modo que Garzón es un muchacho tirando a equivocado al que hay que dar menos tunda y más halago, joder, porque no podemos privarnos de un tipo que un día nos tira el chuletón a la cabeza, y otro nos advierte de que una muñeca navideña es una diabla de la desigualdad. Читать дальше...