El lado oscuro del fútbol

Zúrich. Agencias

 

En esta época de fiebre de Star Wars por el estreno del sétimo episodio, en el fútbol se vive otra saga donde muchos vivieron bajo la influencia del lado oscuro de la fuerza. En mayo pasado, una investigación de la Fiscalía de Estados Unidos desnudó los malos manejos que llevaron tras las rejas a varios dirigentes.

 

Mientras eso pasó, el Comité de Ética de la FIFA, máximo ente del fútbol, decidió abrir su propio expediente al mandamás Joseph Blatter y al presidente de la UEFA, Michel Platini, que ha terminado con una sanción de ocho años para ambos que los aleja “de toda actividad relacionada con el fútbol, administrativa, deportiva o de cualquier tipo”, lo que le impide francés postular a la presidencia de la FIFA como lo tenía planificado para el 26 de febrero próximo.

 

Pese a ser esperado, el castigo no deja de ser impactante. Sus víctimas llevan dos apellidos ilustres del fútbol. Blatter, un coronel del ejército suizo reconvertido en dirigente, y Platini, un futbolista de elite ganador de tres balones de oro, además de seleccionador francés antes que presidente de la UEFA desde 2007.

 

El Comité de Ética señala que el pago de dos millones de francos suizos (1,8 millones de euros) que hizo la FIFA a Platini en febrero de 2011, autorizado por Blatter, “no tenía base legal en el acuerdo firmado por ambos dirigentes el 25 de agosto de 1999, por trabajos de asesoría que realizó entre ese año y el 2002” y que los puso en el ojo de la tormenta. 

 

“Ni en su declaración escrita ni en su audiencia personal” pudo Blatter demostrar “otra base legal” que justificase ese pago. Sus alusiones a un “acuerdo verbal” con Platini “no resultaron convincentes y fueron rechazadas” por la cámara del Comité de Ética que estudió el caso. Esta instancia considera que Blatter “no mostró una actitud ética, no aplicó las reglas y regulaciones de la FIFA y demostró una ejecución abusiva de su posición como presidente”, violando así el artículo 13 del código ético del organismo, sobre las reglas de conducta. Aquel pago a Platini violó además el artículo 20 del Código, relativo a la oferta y recepción de regalos u otros beneficios, y el artículo 19, que se refiere al conflicto de intereses.

 

Si bien los cargos de corrupción no fueron mantenidos, se les consideró culpables de “conflicto de intereses” y de “gestión desleal”. Michel Platini fue castigado además con pagar una multa de 80.000 francos suizos (80.400 dólares), más alta que la de Joseph Blatter, fijada en 50.000 francos suizos (50.250 dólares).

 

Pese a la brecha abierta desde hace tiempo entre ambos, la sanción vuelve a unirlos ahora igual que en los ya lejanos tiempos en los que el francés fue el elegido por el suizo como su asesor y llamado incluso a ser su sucesor natural, aunque con el tiempo se distanciaron porque el francés pedía cambios que Blatter no hacía.

 

El dirigente suizo también viene siendo investigado por la justicia de su país, a la que le pidió que esclarezca la limpieza en el proceso de elección de Rusia y Qatar como sedes de los mundiales del 2018 y 2022, que contó con el voto de varios dirigentes que se encuentran ahora suspendidos o investigadas en medio de este escándalo en la FIFA.

 

El pasado 17, Blatter dedicó horas para defenderse en una audiencia que le permitió volver a las instalaciones de la FIFA por las que Platini evitó pasar al día siguiente. El francés desistió de acudir a la audiencia por considerar que su caso estaba prejuzgado de antemano, un argumento que ha vuelto a ofrecer al conocer su castigo. El lado oscuro sigue manchando al fútbol.

 

Ambos apelan al TAS para tratar de revertir sus sanciones