Van dos años y no se inicia construcción de Tierra Prometida

Desde hace más de un año, el ex mercado mayorista de La Parada ya no funciona. Pese a ello, cientos de comerciantes minoristas siguen apostados en calles aledañas como Aviación, 28 de Julio, San Pablo y Bausate y Meza. Ellos debían ser trasladados a la zona denominada Tierra Prometida, en Santa Anita. Sin embargo, allí hoy solo hay un terreno baldío.

 

En marzo del 2013, el acuerdo de concejo Nº 538 declaró de interés público la construcción y puesta en funcionamiento de un mercado minorista de productos perecibles, el cual complementaría el servicio del Gran Mercado Mayorista de Lima (GMML) y acogería a cerca de 1.500 vendedores.

 

Después de dos años, los comerciantes minoristas exigen que la Municipalidad de Lima, a través de la Empresa Municipal de Mercados Santa Anita (Emmsa), les permita iniciar la habilitación del terreno.

 

La presidenta de la Comisión Ejecutiva del proyecto Tierra Prometida, la comerciante Carmen Vílchez, sostiene que en diciembre pasado la gestión municipal debía entregarles el terreno de casi 5 hectáreas, ubicado frente al GMML. 

 

"Con (Susana) Villarán se acordó que en diciembre se haría la entrega notarial de las llaves. La nueva gestión (Luis Castañeda) nos pidió esperar que las gerencias se instalen y lo hicimos durante 60 días, pero hubo silencio total. No nos han entregado las llaves y ya pasaron ocho meses", indica la vocera de esta comisión que agrupa a 32 asociaciones.

 

La preocupación de los comerciantes aumenta al conocer que desde octubre próximo las obras de la línea 2 del Metro de Lima podrían afectar sus negocios. Por ello exigen una alternativa al alcalde Luis Castañeda; de lo contrario, advierten que aplicarán las penalidades dispuestas en el contrato firmado con Emmsa y hasta paralizarían la distribución de los productos perecibles. 

 

Según la ex gerente de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Lima Carmen Vildoso, en los dos años del acuerdo de concejo, se cumplió con la elaboración de los planos, la firma de contrato de arrendamiento (febrero del 2014), así como la solicitud al municipio de Santa Anita para la licencia de funcionamiento. También se acordó con Emilima construir un cerco perimétrico.

 

Sin embargo, a la fecha, aún no tiene licencia, lo que imposibilita iniciar la construcción.

 

Fuentes del municipio de Santa Anita informaron que no existen solicitudes en curso vinculadas al proyecto. "Se mantiene la situación del año pasado. Es un terreno árido que no tiene servicios básicos", dicen. En la anterior gestión, Lima y Santa Anita tuvieron problemas por este tema, el cual llegó hasta Indecopi.

 

Este diario intentó –reiteradas veces– comunicarse con un vocero del municipio de Lima, pero no hubo respuesta. El último martes, fuentes ediles señalaron que la anterior gestión no había destinado un presupuesto para la construcción. 

 

Sobre esto, el regidor de Diálogo Vecinal, Hernán Núñez, precisó que el proyecto no requería partida presupuestal porque la modalidad de financiamiento permitía que los comerciantes costeen la construcción a través de un alquiler. "El arrendamiento es una decisión administrativa, que no necesariamente debe pasar por el Concejo Metropolitano".