Fortuny viaja a Málaga en forma grabados
El grabado siempre fue la carta de presentación del artista catalán Mariano Fortuny. Ahora, 145 años después, el Museo Carmen Thyssen Málaga exhibirá una colección de las obras del autor en la Sala Noble. Sus principales grabados podrán visitarse a partir del próximo 29 de octubre hasta el 2 de febrero en esta exposición del museo malagueño llamada «Fortuny grabador».
Mariano Fortuny y Marsal (1838-1874), maestro de la pintura española del siglo XIX, fue autor de una obra muy moderna y experimental cuya prometedora evolución quedó truncada por su prematuro fallecimiento, a los 34 años en Roma.
Partiendo de la pintura como dedicación principal, su aproximación al grabado es la propia de un pintor-grabador, buscando trasponer a las planchas los efectos pictóricos de sus obras, en las que la luz y una factura suelta son protagonistas, según indicaron desde el Museo Carmen Thyssen en un comunicado. En apenas una treintena de grabados, de temas variados, el reusense exploró las posibilidades expresivas del aguafuerte y el aguatinta, demostrando una maestría técnica y un perfeccionismo que le equipara a otros grandes pintores-grabadores españoles como Ribera o Goya.
Se trata, por tanto, de un artista de primera fila en la historia del grabado en España, cuyas obras, cedidas para la ocasión por el coleccionista Enrique Juncosa Darder, permitirán al público aproximarse a la que, junto con su amplísimo corpus de dibujos, es sin duda la producción más personal del artista.
Entre los temas representados, la muestra destacará los de inspiración clásica, los costumbristas, y los orientalistas tanto en pintura como en grabado.
La exposición que cuenta con la colaboración de la Fundación Cajasol, testimonia la maestría técnica del artista en un género, el grabado, del que fue él mismo coleccionista con piezas de Rembrandt, Ribera y Goya.