La ex mujer del asesino de Tetuán le denunció el mismo día del crimen

María del Pilar temía a su actual pareja. No era la primera vez que su presunto asesino actuaba de forma violenta, ya lo había hecho antes, con su ex mujer.

Así, como han revelado fuentes de la investigación a Europa Press, el mismo día del asesinato de María del Pilar, su ex esposa interpuso una denuncia contra él por amenazas en la Comisaría de la Policía Nacional de Alicante. El presunto asesino, al que al cierre de estaba edición aún continuaba buscando la Policía, le había enviado mensajes intimidatorios la noche anterior a su WhatsApp y ella ya no aguantó más. Las amenazas tenían que parar y, por eso, dio un paso al frente y se personó en la comisaria de la localidad levantina donde reside.

Los mensajes de su ex marido eran de suficiente gravedad como para que la Policía Nacional determinara que la mujer estaba en una situación de riesgo extremo y estableció un sistema de protección integral hacia la denunciante, según las mismas fuentes.

Al realizar la valoración personal de riesgo, el sistema VioGen de seguimiento de casos de violencia machista determinó que la denunciante tenía «riesgo extremo» de violencia de género, por lo que se le dio «protección integral de forma continua».

Según las mismas fuentes, la mujer y el supuesto agresor tenían hijos en común, aunque no han revelado cuántos.

Las Fuerzas de Seguridad buscan al presunto asesino de la cirujana de 49 años, a la que golpeó y apuñaló en una vivienda del barrio madrileño de Tetuán antes de avisar a un amigo para que le ayudara a deshacerse del cadáver. A las 00:20 horas el amigo del presunto autor alertó a la Policía del asesinato, les facilitó varias fotografías que le había enviado, en las que se veía el cuerpo aparentemente sin vida de una mujer y facilitó a los agentes la dirección de la vivienda donde vivía la víctima.

Los agentes se desplazaron a la calle Tenerife y, tras derribar la puerta, se encontraron el cadáver de la mujer con contusiones en la cabeza y heridas de arma blanca.

María Pilar también aparecía como víctima en la base VioGen y el hombre como agresor. Ambos figuraban en este sistema desde noviembre de 2018, cuando una patrulla policial observó en la calle cómo un hombre golpeaba a una mujer. Los agentes intervinieron y detuvieron al agresor, que resultó ser su pareja, pero ella no quiso interponer denuncia ni pedir la orden de protección. Aún así, fue arrestado.

La víctima tenía un hijo menor de edad, con lo que el número de huérfanos de la violencia de género asciende a 28 desde enero hasta hoy; además, otros tres niños han sido asesinados por las parejas o ex parejas de sus madres.