El balance que se puede hacer de la primera semana del cierre perimetral decretado en la provincia de Sevilla, acompañado del toque de queda, deja un halo para la esperanza al analizar los datos del Covid-19 correspondientes a los últimos siete días, si bien contrastan con la peor cifra de fallecidos en esta segunda ola, superando así a los de la primera.
Los trece muertos registrados ayer elevan la cifra total a 600, de los que 307 corresponden a los meses de julio a noviembre, por los 293 que dejó el virus de marzo a junio. Pero además, este análisis deja varios datos significativos que evidencian que nos encontramos ante un punto de inflexión de la pandemia en esta segunda ola a pesar de que ya se ha cobrado más víctimas mortales que la primera.
Por un lado, la mitad de los municipios que componen la provincia llevan tres días reduciendo el avance de la pandemia, por lo que se aprecia de manera clara cómo la curva se va doblegando desde hace días. Y eso además queda reflejado en una menor incidencia acumulada tanto de estas localidades como de sus respectivos distritos sanitarios a los que pertenecen.
Hay que tener en cuenta, en cualquier caso, que se aprecia más claramente la bajada en los últimos siete días municipio por municipio que la tasa de incidencia, puesto que esta tiene en cuenta los guarismos de las dos últimas semanas, cuando el cierre perimetral aún no se había decretado, de ahí que quede acompasado el freno que ya existe en la mitad de la provincia tras los últimos siete días con el descenso proporcional en la incidencia acumulada puesto que esta tiene en cuenta siete días en los que aún no estaba el confinamiento.
A pesar de ello, se aprecia ya que de los cinco distritos sanitarios en que se divide la provincia, en tres de ellos se ha reducido esta tasa (Este, Norte ySur), mientras que el de Sevilla capital frena de golpe la subida y mantiene la misma tasa de hace dos días (526). Actualmente, la provincia de Sevilla tiene una tasa de 582, lo que supone seis puntos menos con respecto al jueves, merced a los «buenos» datos de los últimos días.
Los dos distritos que repiten bajada dos jornadas consecutivas son el del Sur y el de Este, mientras que el del Norte logra darle la vuelta a la curva con un descenso de siete puntos con respecto a hace dos días. En el Aljarafe se ha pasado de bajar tres puntos el jueves a subir nueve ayer. Pero además, esta desaceleración del coronavirus en la provincia queda reflejado en que de los 98 pueblos donde está presente el Covid, 53 logran encadenar dos días seguidos con descenso de contagios tras el análisis de los últimos siete días.
Tan solo hay ocho localidades de las 106 que conforman la provincia que permanecen «limpias» de Covid en este mismo periodo (Almensilla, Las Navas, La Luisiana, El Madroño, El Real de la Jara, El Ronquillo, Coripe y El Garrobo).
De los 31 municipios que componen en distrito sanitario Aljarafe, trece encadenan dos días de bajada y otros cuatro repiten los mismos datos. El resto suma, pero en pequeñas cantidades —Gines el que más con diez casos nuevos—. Tras los últimos siete días, el número de contagio aquí es de 958 (tres menos que el jueves).
El que le ha dado la vuelta a la pandemia con más claridad es el del Este, donde tres de sus municipios ya fueron confinados por segunda vez antes del cierre perimetral de la provincia (Casariche, Écija y Pedrera). En esta zona, hay 339 infectados tras los últimos siete días (lo que supone un descenso de 134 con respecto a los datos ofrecidos por el Instituto de Estadísticas y Cartografía de Andalucía (Ieca) hace dos días. De los 23 pueblos con Covid, trece encadenan dos días de bajada y cinco mantienen sus guarismos al igual que ayer.
En el distrito Norte son 19 de 27 los municipios que han ido restando casos en los últimos días, seis copian los datos de anteayer y tan solo hay dos que suben. Por su parte, el aumento de casos en Lebrija y Los Palacios oscurecen las optimistas cifran que refleja la mayoría de los pueblos que forman parte del distrito Sur. De las quince localidades donde está presente el Covid, siete logran reducir contagios frente a otros siete que suben. Otro dato que evidencia esta bajada tiene que ver con los municipios que superan el millar de casos por cada cien mil, que son 13 frente a los 17 de hace cuatro días.
Una ola más mortal
La Consejería de Salud y Familias anunciaba ayer que la pandemia se había cobrado la vida de trece pacientes en las últimas 24 horas, con lo que dejaba la cifra global en números redondo, 600 desde el inicio de la pandemia, por lo que el coronavirus en esta segunda ola ya se ha cobrado más vidas que en la primera.
Según las estadísticas de la Junta de Andalucía analizadas por ABC, marzo sumó 55 decesos, por los 197 de abril —que ha sido el más trágico hasta la fecha—, los 34 de mayo y los tres fallecimientos que se conocieron en junio, todos pertenecientes a la primera ola del virus en la provincia.
La segunda se inició en julio con cuatro muertos a los que acompañaron tres más en agosto, que es cuando empezó a notarse ya un importante aumento de positivos. En septiembre se alcanzaron los 75 fallecimientos y el mes pasado cerró con cifras similares a las de abril, 184 decesos. Noviembre se ha cobrado, hasta la fecha, 42 vidas (una media de siete al día).
Además, en esta segunda ola se han ido conociendo desde agosto nuevos pueblos con víctimas que habían esquivado la muerte en los primera parte de la pandemia. Así, en la primera ola los 293 fallecidos se repartieron entre 44 municipios, mientras que en esta segunda parte de la pandemia son 17 nuevos municipios donde han perdido a uno o varios de sus vecinos.Los últimos que se han incorporado a esta lista se conocieron precisamente ayer, Gines Olivares y Villanueva del Río y Minas.
Y todo esto llega cuando la presión hospitalaria se sitúa en las cotas más altas en esta segunda parte de la pandemia, coincidiendo con el patrón segido en la primera. Octubre y lo que va de noviembre es similar al padecido en abril, cuando se batieron todos los récords de fallecidos y hospitalizados, si bien hay que decir que por el momento aún hay margen en los hospitales de la provincia para no colapsar el sistema sanitario.
