Nos preguntáis si la visita de los Reyes a Ceuta y Melilla ha sido cancelada
El Gobierno asegura no tener constancia de que Ceuta y Melilla fueran destinos previstos en el marco del recorrido real por España, mientras que Zarzuela niega haber confirmado esas visitas a los medios, aunque no descarta viajar a las ciudades próximamente.
En las últimas semanas, se han publicado varias informaciones contradictorias respecto a la inclusión de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla en la gira nacional que están llevando a cabo los Reyes de España desde finales del mes de junio.
Esto es lo que sabemos.
15 de junio: Zarzuela anuncia un viaje por las comunidades autónomas
A mediados del mes de junio, la Casa Real informaba directamente a los medios de comunicación de que los Reyes de España visitarían en las próximas semanas todas las comunidades autónomas para agradecer el esfuerzo de la sociedad española durante la crisis del COVID19 y apoyar las actividades propias de cada región.
El viaje comenzó el 23 de junio, una vez finalizado el Estado de Alarma, y se prolongará todo el mes de julio. La primera parada fue Canarias, seguida de Baleares, Andalucía, Castilla La Mancha, Comunidad Valenciana, Murcia, Aragón, La Rioja y Castilla y León.
Los Reyes visitan la Casa-Museo Pérez Galdós en Las Palmas de Gran Canaria. https://t.co/bS8sa7qYDQ pic.twitter.com/9is8ebBywN
— Casa de S.M. el Rey (@CasaReal) June 23, 2020
2 de julio: Medios locales confirman la visita a Ceuta y Melilla
Citando a un portavoz de Zarzuela, un medio local ceutí publicó en exclusiva el día 2 que Don Felipe y Doña Letizia viajarían a las ciudades autónomas durante la gira. “Lo que aún se desconoce es la fecha exacta”, decía el artículo, ya que todavía se estaban “cerrando agendas”.
Otra información de El Confidencial negó esa confirmación de Zarzuela, pero sí habla de fuentes gubernamentales. Al parecer, estas habrían indicado que la visita “se celebraría en breve en el marco de la gira que el jefe del Estado efectúa por toda España” mientras que desde comunicación de la Casa del Rey se puntualizó que no estaba prevista para las primeras semanas de julio.
3 de julio: Fuentes oficiales desmienten la parada en las ciudades autónomas
Al día siguiente, la Agencia Efe distribuyó una nota de prensa citando “fuentes oficiales”, sin especificar si se trataba del Gobierno o la Casa del Rey.
Según el texto, la visita a Ceuta y Melilla nunca estuvo sobre la mesa: “Zarzuela anunció ese recorrido por todas las comunidades pero descartó desde un primer momento que en el periplo fueran a hacer una parada en esas dos ciudades autónomas”:
Además, insistieron en recordar que no había “ninguna previsión al respecto en su agenda por el momento.”
6 de julio: Se habla de cancelación, apuntando a una decisión del Gobierno
Tras conocerse ese nuevo dato, El Confidencial abordaba el asunto en una noticia donde se expone que hasta el viernes 3 de julio Ceuta y Melilla sí “estaban en los planes de viaje de los Reyes”. El día anterior (jueves 2 de julio), la prensa local de Ceuta habría obtenido confirmación desde el Palacio de la Zarzuela, mientras que El Confidencial recibió esa respuesta positiva “de dos fuentes gubernamentales”.
Pero posteriormente, el director de Comunicación, Jordi Gutiérrez, habría modificado la contestación al medio ceutí. Según su declaración a ese periódico, sólo conocían la agenda hasta el día 12 de julio, aunque no llegó a desmentir rotundamente la visita.
Además, de acuerdo con el artículo, las decisiones relativas a viajes de los monarcas corresponden al Gobierno, no a la Casa Real.
7 de julio: El Gobierno asegura que no estaba dentro de la programación prevista
Durante la rueda de preguntas posterior al Consejo de Ministros, la ministra portavoz y de Hacienda, María Jesús Montero, declaró que “hasta donde le consta” al ejecutivo, la agenda de los Reyes no incluía visitar Ceuta y Melilla en el corto plazo (minuto 1:31:49). En esa línea, añadió que no se trataría de una cancelación: “No hay lugar a una anulación a lo que no estaba programado, tildando de “especulaciones que carecen de fundamento” las informaciones publicadas por varios medios de comunicación.
“En cualquier caso, son circunstancias que pueden variar y lo más que podemos comentar es que no nos consta”, dijo Montero.
10 de julio: Zarzuela no descarta incluir las ciudades en el recorrido
Desde la dirección de Comunicación de la Casa del Rey, aseguran no “haber confirmado a los medios absolutamente nada sobre Ceuta y Melilla”. En conversación con Newtral.es, no rechazan la visita a Ceuta y Melilla a corto plazo ya que la agenda de la gira “aún no está cerrada”.
Según explican, “faltan varias comunidades por fijar” y generalmente “las fechas y lugares definitivos se dan con pocos días de antelación”. «Extremadura tampoco está programado aún, por poner un ejemplo», añade Zarzuela.
Respecto a quién posee la última palabra sobre la agenda de Sus Majestades, de acuerdo con el artículo 64 de la Constitución Española “los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno y, en su caso, por los Ministros competentes.”
¿Por qué la visita genera polémica?
Las ciudades autónomas son un “punto conflictivo de política exterior”, en palabras de la dirección de comunicación de la Casa del Rey. Como demostró la hasta ahora primera y única visita de un jefe de Estado en democracia, la relación con Marruecos en este aspecto es tensa. El rey emérito, Juan Carlos I, se desplazó a Ceuta y Melilla en noviembre del año 2007 acompañado de Doña Sofía. Por su parte, los actuales monarcas nunca han realizado un viaje oficial a esas localidades.
Cuando se anunció el viaje en 2007, el Gobierno de Marruecos reaccionó condenando la visita a “las ciudades marroquíes expoliadas”. El día que los reyes eméritos llegaron a Melilla, centenares de marroquíes se concentraron en el paso fronterizo con Marruecos al grito de «Juan Carlos, no; un solo rey, Mohamed VI».
El rey marroquí Mohamed VI publicó al día siguiente un comunicado oficial expresando su rechazo a ese “acto nostálgico y de una era sombría y superada”, advirtiendo que las autoridades españolas deberían “asumir su responsabilidad en cuanto a las consecuencias que pueden poner en peligro el porvenir y la evolución de las relaciones entre ambos países».
Fuentes: