El Ejército de Tierra apuesta por un sistema de guiado 100% español para aumentar la precisión de sus proyectiles

La empresa tecnológica madrileña Escribano Mechanical & Engineering ha sido adjudicataria del ESTRA, programa de Defensa para guiado de proyectiles. 

La empresa tecnológica española Escribano Mechanical & Engineering ha resultado adjudicataria del programa ESTRA para dotar al Ejército de Tierra de munición guiada a través de una nueva espoleta correctora de trayectoria, un proyecto en el que también participa Rheinmetall Expal Munitions como subcontratista y socio tecnológico.

El contrato, que tendrá una duración de cuatro años, dotará a las Fuerzas Armadas de una capacidad tan estratégica como la de los proyectiles guiados, algo fundamental debido al contexto geopolítico actual, en un momento marcado por la guerra de Ucrania y el conflicto de Israel con los terroristas de Hamás, que han llevado a la mayor parte de los países de nuestro entorno a un aumento de los presupuestos en defensa.

El programa supone un nuevo desarrollo que integrará el kit de guiado de Esscribano con la espoleta crono-electrónica de Rheinmetall Expal Munitions. El objetivo es desarrollar una nueva espoleta correctora de trayectoria para su uso integrado con el proyectil de alcance extendido de 155mm ER02A1, dotándole de una mayor precisión que la actual. El conjunto final integrado demostrará el funcionamiento combinado de los elementos hardware y software del kit de guiado de Escribano con las funcionalidades de la espoleta de Rheinmetall Expal Munitions, dotando a los proyectiles ER02A1 de capacidad de corrección de su trayectoria de forma que asegure un margen de error (CEP) menor de 30 metros.

Tras la integración de dicha espoleta en el proyectil, demostrando su compatibilidad dimensional, aerodinámica y de funcionamiento, la nueva espoleta será calificada para uso en proyectiles de 155mm ER02A1BB, sometiéndose posteriormente a una validación operativa que permita evaluar sus ventajas por parte de las FAS.

Fue el pasado año cuando ambas compañías firmaban un acuerdo para el desarrollo e integración de una espoleta guiada en la munición de alcance extendido de 155 mm. y cuya firma tuvo lugar en las dependencias del Mando de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra en el Cuartel General del Ejército.

El acuerdo se enmarcaba dentro del modelo I+D+i de la Defensa dirigido por la Dirección General de Armamento y Material “para llevar a cabo una estrategia directora de las inversiones del Ministerio de Defensa, estableciendo unos objetivos tecnológicos orientados a satisfacer las necesidades de nuestras Fuerzas Armadas y, a la vez, potenciar la base tecnológica de la defensa de España”.

Expal suministra desde hace varios años munición de 155 mm de alcance extendido (Extended Range) para los obuses de 155 mm SIAC y M109A5 de las unidades de artillería del Ejército de Tierra. Estos proyectiles, dotados de unidad base bleed, propulsión por carga modular y espoleta electrónica EC-102, suponen un importante avance en prestaciones con respecto a los convencionales, al aumentar la seguridad y la eficacia de las operaciones, y ampliar los alcances hasta los 40 kilómetros. La munición base bleed tiene un dispositivo en la base del proyectil que calienta el aire que genera en su trayectoria y reduce la resistencia, con lo que al final se gana en alcance. En este caso, más de diez kilómetros respecto a la tradicional.

Escribano, por su parte, ha desarrollado Alkon, un sistema de guiado con sensor GPS, GNSS (Global Navigation Satellite System) y navegación inercial (INS). El sistema mejora la precisión efectiva de los lanzamientos con CEP (error circular probable) inferior a 20 metros en lanzamientos de hasta 40 kilómetros, gracias a la sección de control y guiado, el diseño de algoritmos, la predicción de impactos, la simulación de vuelo y los sensores de Escribano, reduciendo así el número de disparos requeridos para destruir un objetivo y minimizando el daño colateral.

El sistema permite la modernización de cohetes de artillería de 70mm a 300mm y proyectiles de artillería de hasta 155mm, sustituyendo la espoleta tradicional por un kit de munición guiada para conseguir la reducción del radio de dispersión inferior a 20 metros.

Los controles de vuelo se realizan a través de cuatro aletas orientables controladas por motores. La velocidad de vuelo es de hasta Mach 3 para cohetes y Mach 2 para proyectiles. La altura de vuelo es de 18.000 y 11.000 metros, respectivamente.