Megyn Kelly y Gretchen Carlson son dos de los rostros más populares de los informativos de Estados Unidos. Dos periodistas que pasaron de presentar noticias a protagonizarlas después de atreverse a denunciar el acoso al que el magnate de Fox News, Roger Ailes, sometía a las mujeres de la redacción. Nicole Kidman y Charlize Theron les prestan ahora sus mejores interpretaciones en «El escándalo (Bombshell)», donde reconstruyen, desde el punto de vista de las víctimas, la figura del magnate. La tercera en este trío de damas contra el villano de los despachos es Margot Robbie, cuyo personaje es la unión de varias de las periodistas que vivieron los actos de Ailes en primera persona.
«El escándalo» es la apuesta personal de Charlize Theron por honrar la valentía de estas mujeres. La sudafricana produce y protagoniza el filme, y eso que la periodista a la que presta ahora su voz no es precisamente su amiga. Theron se convierte en Megyn Kelly, presentadora estrella de Fox News que, después del escándalo, abandonó la cadena para presentar su programa matinal, Megyn Kelly Today, en NBC. Pero no duró ni un año. «Si una persona blanca se pinta la cara de negro, se mete en problemas. Pero, ¿si es una persona negra que se maquilla de blanco?».
El escándalo
Ese comentario, racista para los estándares de Estados Unidos, le costó el puesto. «De lejos puede parecer que no tenemos nada en común. Obviamente, hay una distancia enorme entre nosotras. Yo soy liberal y ella ha dicho cosas y apoyado ideas que son moralmente contrarias a mí. Cuando decidí interpretar este papel, me fijé en las similitudes y no en las diferencias. He descubierto en el personaje a una mujer ambiciosa, decidida, que de pronto se da cuenta que está envuelta en un ambiente tóxico y decide utilizar sus armas para cambiarlo. Entiendo que Megyn es una mujer dentro de sus propias circunstancias», admitió la intérprete, que es madre de dos hijos afroamericanos. «Sus comentarios racistas fueron devastadores para mí. Abrazar a una mujer que ha sido acusada de racismo fue terriblemente difícil», reconoce la actriz.
En 2016, Gretchen Carlson -interpretada por Nicole Kidman- presentó una demanda contra Ailes. La periodista, un rostro muy reconocido y admirado por la audiencia de la cadena Fox News, llevaba un año grabando sus conversaciones con Ailes en las que él le hacía insinuaciones sexuales. Carlson fue despedida, según su demanda, por rechazar todas las insinuaciones sexuales de Ailes. «Decidí interpretar a Carlson porque sentí que la película representa un momento importante de la historia. Creo que estamos viviendo algo importante con el #MeToo y las protagonistas de esta historia fueron cataclismos dentro de este enorme cambio sociológico», explicó Nicole Kidman.
La unión hace la fuerza
A la demanda de Carlson se acabarían uniendo varias mujeres, entre las que se encontraba Kelly, que habló directamente con el consejo de Fox. «Son mujeres que no vuelven a trabajar porque son apartadas. Esas cosas ocurren también en el cine y el teatro: cuando un actor o una actriz es considerado tóxico deja de recibir ofertas. En ese sentido, admiré que tuvieran la fortaleza de arriesgarlo todo. Ellas fueron las primeras. No vamos a negar que se atrevieron a empezar un movimiento que era necesario y que está cambiando las vidas de las mujeres en todo el mundo», confesó Charlize Theron.
Theron admite que le encantó el guión de Charles Randolph, por lo que saltó sobre un personaje y una historia que retrata la fuerza de las mujeres en momentos de desesperación. Fue la misma Theron quien pidió a Jay Roach, el director de «Trumbo», que dirigiera «El escándalo». «Sin Jay no me sentía capaz de interpretar el personaje. Gracias a él, que me llevó de la mano, me decidí a interpretarla. Han sido muchas las conversaciones con Jay sobre cómo debía representar a esta mujer. Él lo tenía clarísimo y yo no. Supo crear un lugar seguro donde explorar y descubrir las polémicas decisiones de mi personaje. Ella no es una mujer en blanco y negro que apoya abiertamente la causa de las mujeres; al contrario, ella busca un equilibrio personal primero y luego la justicia y la dignidad de sus compañeras», reconoció Theron, que parece haberse reconciliado con una de las mujeres más polémicas de Estados Unidos.
