Control del tiempo, la vestimenta y el dinero. Castigos de silencio. Dominio de su intimidad, del momento en que se tienen que mantener relaciones sexuales y cómo. Sumisión. Pruebas imposibles de superar. Y algo más evidente: insultos y amenazas. Al lector que se le pregunte si el abuso es lo mismo que el amor, sabría la respuesta. Pero Pilar y Sara tenían 15 años.
Elisabeth, algunos más. Las tres vivieron aplastadas por sus parejas en su juventud. Sara, por dos veces. Saltó de una relación de... Читать дальше...