Europa todavía queda lejos
El Lyon, liderado por la noruega Hegerberg, siempre reivindicativa y goleadora, arrolla en la primera media hora al Barça en la final de la Liga de Campeones
Algo está cambiando en el mundo. Hubo un tiempo en que los estadios de fútbol parecían tierra minada para las muchachas; ni se sentaban en las gradas, mucho menos pisaban el campo. Pero algo está cambiando. El Olympique de Lyon dio cátedra con la pelota en Budapest. Su despliegue fue un homenaje para cualquiera que se reconozca admirador del fútbol; a cualquiera, por supuesto, que no le importe el color de la camiseta. La supremacía de la Leonas la sufrió el Barcelona.