La Copa con más historia
¿Qué tan extraño es que cambie el nombre de un torneo de futbol según el jefe de Estado en turno en un país en pleno S. XXI? En España, la competición más antigua, ha sufrido varios cambios de nombre en más de un centenario de historia, desde Copa de su Majestad el Rey, Copa de España o del Presidente de la República, Torneo Nacional de Futbol, Copa de su Excelencia el Generalísimo y de regreso a su nombre oficial actual Copa de su Majestad el Rey, los distintos bautizos nos han servido para entender parte de la historia que ha atravesado el gobierno de España, ya que la coloquialmente conocida en el mundo como Copa del Rey, es un recordatorio más de que el deporte y la política no siempre transitan por caminos separados.
Si bien La Copa ha dejado anécdotas memorables, desde su antecedente donde se vivió el primer clásico español de la historia en 1902 con la coronación de Alfonso XIII, pasando por una final blanca en 1980 donde el Real Madrid venció al Castilla en tiempos de Juanito y Del Bosque, o el primer clásico en una final con nada más y nada menos que el Barça de Menotti y el Madrid de Di Stefano, aunado a “la final de las botellas” en el 68, o la más larga de la historia en el 95 cuando el Deportivo La Coruña se coronó tras un duelo que se empezó a disputar un 24 de junio y acabó un 27 debido a una lluvia torrencial que como protagonista dejó la cancha del Bernabéu como laguna, sin olvidar el pésimo festejo del centenario de los merengues que con todo y galácticos cayeron en 2002 sorpresivamente ante el Depor o el “Alcorconazo” con Pellegrini en la primera ronda con un humillante 4 por 0 y remontadas históricas, como la del Barça ante el Athletic en 2009 o la celebración de Sergio Ramos en la que el trofeo se le cayó del autobús en 2010; simplemente podríamos no acabar, pero lo que sucedió en 1943 va más allá del abultado marcador de 11 por 1 del Real Madrid sobre el Barcelona.
La ida de la semifinal había quedado con ventaja de 3 goles para los culés, y por lo mismo nadie esperaba tal resultado en la vuelta en Chamartín. El capítulo es algo que no le gusta recordar a ninguna de las dos instituciones por el contexto político. España vivía en tiempos del franquismo y posguerra. Nada fue comprobado, pero se dijo previo al encuentro que los jugadores del Barça fueron intimidados por policías, mientras que otras versiones aseguran que visitaron ambos vestidores como advertencia de buena conducta. En la ida el Madrid perdió por la presión del público en la casa azulgrana, en la vuelta les devolvieron el favor. Ha sido la mayor goleada en la historia del clásico español, cuando la Copa era la del Generalísimo. Más de siete décadas después, todavía el ambiente político pesa sobre el deporte. El año pasado se dio a conocer que les confiscaron bufandas y jerseys amarillos a aficionados del Barcelona previo a la final ante el Sevilla. La polémica invadió. Hasta hoy algunos personajes del futbol, como Pep Guardiola, utilizan el moño amarillo como muestra de apoyo a la independencia de Cataluña. La historia de España, la Copa y el futbol seguramente se seguirán escribiendo a la par, más allá de quien gane.