La hemeroteca no deja de sorprendernos y, en ella, hallamos la divertida anécdota protagonizada por la hoy ministra de Economía, Nadia Calviño el día del Referéndum sobre la OTAN, el 12 de marzo de 1986, y que fue convocado por el gobierno socialista de Felipe González. Con esta votación se certificó nuestra permanencia en la Alianza Atlántica. Un plebiscito para el que la ahora ministra no había todavía alcanzado la mayoría de edad (nació el 3 de octubre de 1968) y en el que pudo depositar su papeleta.
Como informó ABC en aquel momento, la entonces hija del exdirector general de RTVE aprovechó la confusión provocada por la entrada de su padre en el colegio electoral para depositar la papeleta. Una circunstancia que quedó reflejada en el acta de la mesa electoral, donde había ejercido el voto.
En la información, el diario explicaba que Calviño era «uno de los menores que están inscritos ya en el censo electoral, a pesar de que aún no tienen la mayoría de edad».Circunstancia que le permitió pasar desapercibida entre «la confusión creada por las cámaras de televisión y de lso reporteros gráficos». A pesar de que no podía hacerlo hasta su cumpleaños.
