La desaceleración «se suaviza» en la región gracias al consumo
Los indicadores anuncian «un cierto freno a la desaceleración» y señalan «un crecimiento pera el segundo trimestre superior al del primero». Un repunte de este tipo no se experimentaba desde que se inició la desaceleración económica en 2017. El Indicador Sintético de Actividad de Andalucía del Observatorio Económico de Andalucía relativo al primer trimestre desmonta varios axiomas. De entrada, según las estimaciones del OEA, al menos a corto plazo, la subida del salario mínimo, lejos de desacelerar la economía, ha podido beneficiarla al incentivar el consumo. Otra cosa será lo que pase a medio y largo plazo al ponerse en riesgo el mantenimiento de empleos de empresas que «ya iban muy justas». En lo que a ingresos se refiere, la modificación del impuesto de sucesiones y donaciones, también tiene escaso peso para los economistas, que también desvinculan los datos aún del cambio de Gobierno. La economía andaluza ha moderado la desaceleración gracias al tirón del consumo, tanto de los residentes como de turistas, que ha superado a la evolución en el resto de España, por lo que el Observatorio Económico ha elevado en una décima, hasta el 2,1 %, la previsión de crecimiento del PIB en 2019. También mejora la previsión de crecimiento andaluz en el primer trimestre hasta el 0,8 %, tres décimas más que en el trimestre anterior, y en una décima el objetivo anual al pasar del 2 % al 2,1 %. El indicador del observatorio pronostica una subida del empleo del 1%. Con esta tasa, el crecimiento interanual del IOEA para el primer trimestre de 2019 es del 2,4%, igual al de la economía española. Se confirma la previsión realizada por el Observatorio Económico de un crecimiento del PIB del 2,4% para Andalucía en el año 2018, coincidente con la estimación reciente de la Contabilidad Regional del INE y, por tanto, inferior al crecimiento del PIB español en dos décimas. «Este pequeño avance de tres décimas en el crecimiento intertrimestral no significa que se haya dejado atrás la desaceleración tendencial de los últimos trimestres de la economía andaluza, pero sí se observa un cambio de tendencia en algunos indicadores», señaló Francisco Ferraro, que compareció junto a Francisco Herrero en la Cámara de Comercio de Sevilla. Al consumo de las familias y de los residentes, «hay que sumar el buen comportamiento del sector exterior y del mercado de trabajo, pues un trimestre más continúa la evolución positiva del empleo, tanto público como privado».
El consumo de las familias mantiene su tendencia positiva según casi todos los indicadores, aunque con desigual intensidad. Por una parte, el Índice de Actividad de los Servicios acelera su crecimiento desde el 4,2% del trimestre anterior al actual 6,4%, lo que supone un crecimiento superior a España, lo que no ocurría desde el tercer trimestre de 2015.