La Copa de la Reina estrena presencia Real en el palco
La Reina Letizia preside hoy en el Estadio Nuevo Los Cármenes de Granada la final de la Copa que lleva su nombre, que mide al Atlético de Madrid y la Real Sociedad en un encuentro que se ha convertido en una nueva demostración de que el fútbol femenino está más en auge que nunca en España, que ha llegado para quedarse.
A la presencia de la Casa Real por primera vez en una final de la Copa de la Reina se une un despliegue de medios nunca antes visto en un encuentro femenino de clubes en España, con más de 150 periodistas acreditados, pertenecientes a 120 medios nacionales e internacionales, y la retransmisión del choque en directo a través de Telecinco, una de las principales cadenas nacionales.
La Reina Letizia preside el histórico choque junto a las principales autoridades locales y los máximos representantes tanto de la Real Federación Española de Fútbol como de ambos clubes, y todos acompañados por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y por un reconocido entrenador de baloncesto que ha dado el salto a la política al más alto nivel, Javier Imbroda, actual consejero de Educación y Deportes de la citada Junta.
Medios y autoridades aparte, la demostración de la fuerza actual del fútbol femenino y de que en Granada se vive un fin de semana inolvidable con el balón como excusa es la presencia en el choque de miles de aficionados de ambos clubes, desplazados para animar a los suyos.
La afición del Atlético de Madrid es mayoría, con alrededor de seis mil colchoneros en las gradas, ya que a todos los desplazados desde la capital de España se han unido decenas de peñas atléticas de toda Andalucía que no se han querido perder el choque, en el que las suyas buscan un doblete histórico.
Por si esto fuera poco, la presencia en el Atlético de Madrid de la granadina Esther González, una de las jugadoras con más futuro del balompié femenino nacional, ha provocado también la simpatía de muchos aficionados locales hacia el club rojiblanco.
No deja de tener mérito el desplazamiento masivo de alrededor de 1.500 aficionados de la Real Sociedad, inferiores en la grada y conscientes de la condición de favorito del rival pero que durante toda su estancia en Granada han demostrado una ilusión por alzar la Copa de la Reina y por la consecución por parte del club donostiarra de un título muchos años después que suple cualquier inferioridad.
Antes del partido no se ha producido ningún incidente y la concordia entre ambas hinchadas ha sido la nota predominante, aunque la aparición de un pequeño grupúsculo del Frente Atlético obligó a la Policía Nacional a extremar las precauciones hasta su llegada al estadio para evitar altercados.
Con cánticos y gritos de apoyo los aficionados de ambas escuadras escoltaron la llegada al recinto deportivo de los autobuses de ambos conjuntos, que siguiendo el protocolo habitual se realizó por diferentes rutas y al mismo tiempo.
El Nuevo Los Cármenes, que en la noche del viernes vibraba con el nuevo paso dado por el Granada CF hacia Primera División, ha mutado parte de su piel en sólo unas horas para ser tomado por colchoneros, txuri-urdin y muchos hinchas neutros que no han querido perderse el primer encuentro de fútbol femenino que acoge la instalación nazarí.
Con un tiempo veraniego más que primaveral, actividades para acercar el evento a la ciudadanía en diferentes zonas de la ciudad y una final que apunta a ser inolvidable, la Copa de la Reina convierte Granada este fin de semana en el epicentro del fútbol femenino europeo, en una fiesta del balón y la mujer.