La presencia de las Fuerzas Armadas en Cataluña deja huella principalmente en tres de las cuatro provincias de la Comunidad, con el Ejército de Tierra como protagonista y solo una unidad de Fuerza Terrestre:
- Barcelona: Inspección General del Ejército (sede en Capitanía General); el Centro de Historia y Cultura Militar Pirenaico (con edificio en la Ciudad Condal); la Tercera Subinspección General del Ejército (acuartelamiento Gobierno Militar de Barcelona); y un batallón de Cazadores de Montaña del Regimiento de Infantería «Arapiles» 62 que tiene su base en el cuartel de El Bruch (Barcelona). Además se encuentra la sede de la Delegación de Defensa en Cataluña, con el coronel Luis Castuera al frente, y la propia Subdelegación de Defensa de Barcelona (cuartel de El Bruch).
- Lérida: la Academia General Básica de Suboficiales del Ejército de Tierra, con base en la localidad de Talarn; también la propia Subdelegación de Defensa de Lérida.
- Gerona: Regimiento de Infantería «Arapiles» 62, con base en el acuartelamiento General Álvarez de Castro, que se localiza en la localidad de San Clemente de Sasebas, en el corazón de la comarca del Ampurdán, constituyendo la única unidad de la Fuerza Terrestre ubicada en Cataluña. Además, en la provincia de Gerona se encuentra el Museo Histórico Militar de Figueras; y la propia Subdelegación de Defensa en la capital gerundense.
En Tarragona también se encuentra, como en cada capital de España, la Subdelegación de Defensa.
Desde el inicio del nuevo desafío secesionista independentista, cuyo culmen fue el referéndum ilegal del 1-O, la presencia de los militares han sido objeto de polémica y escraches en actos como los del Salón de la Enseñanza de Barcelona. Asimismo se han venido criticando vuelos del Ejército del Aire, a modo de maniobras. No se esconde desde el independentismo que su presencia no es bienvenida en Cataluña.
Incluso la ahora fugada Marta Rovira (ERC) aseguró que el objetivo «del Ejército era provocar un escenario de violencia extrema con muertos en las calles» tras el 1-O. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, también criticó la figura del almirante Pascual Cervera, héroe de la guerra de Cuba, al que quitó del callejero «por facha». Una declaración que provocó la reacción de la Armada Española.
Actos en cuarteles
No obstante, en los últimos años el cuartel de El Bruch y las demás instalaciones militares en Cataluña se abrieron a la sociedad sin complejos -como en el resto de España- en festividades como el Día de la Fiesta Nacional o el Día de las Fuerzas Armadas, que se celebra a finales de mayo y que en 2019 debería celebrarse el 2 o el 9 de junio para no hacerlo coincidir con las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo.
La Armada también suele participar cada año con un buque en el Salón Náutico de Barcelona, que se celebra en octubre. ¿Qué decidirá al respecto el actual Gobierno? La respuesta aún está por ver.
