El Régimen de los Ayatolás apunta a los separatistas árabes como responsables del atentado de este sábado que mató a 29 personas en Ahvaz, y promete venganza por «este acto terrorista».
Según Teherán, se trata del Frente Popular y Democráticos de los Árabes de Ahvaz (Fdpaa), grupo separatista que supuestmanete habría perpretrado el atentado durante un desfile militar.
Ayer en Ahvaz, capital de la provincia de Khuzestan que cuenta con una población mayoritariamente árabe, un comando de cuatro hombres abrió fuego contra la multitud que asistía al desfile militar antes de ser abatidos por las fuerzas de seguridad iraníes.
El drama de Ahvaz llegó a los titulares el domingo, y muchos periódicos publicaron fotos de soldados que transportaban niños que habían sido disparados por el comando. Varios títulos insistieron en la «unidad» de la nación iraní frente a este ataque.
Según la televisión estatal, el funeral de las víctimas se realizará el lunes. «No tenemos dudas sobre la identidad de quienes lo hicieron», dijo el presidente iraní, Hassan Rohani, antes de despegar hacia Nueva York, donde asistirá a la Asamblea General de la ONU.
Estados Unidos e Irán
La embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, rechazó hoy las acusaciones de Irán, quien responsabilizó a Washington de estar implicado en el ataque al desfile militar ocurrido este sábado en Ahvaz.
«Tiene al pueblo iraní protestando, cada puñado de dinero que entra en Irán va a su ejército, ha oprimido a su pueblo por un largo tiempo y necesita mirar a su propia base para descubrir de dónde viene eso», dijo hoy Haley en una entrevista en la cadena CNN.
«Puede culparnos de todo lo que quiera. Lo que tiene que hacer es mirarse al espejo», agregó Haley en alusión al presidente iraní, Hasan Rohani, quien apuntó tras el atentado que los «pequeños países mercenarios de la región» reciben el respaldo de EE.UU., ofreciendo a esas naciones las condiciones necesarias para cometer crímenes.
Haley condenó el ataque terrorista, como lo haría en cualquier caso, y aseguró que «Estados Unidos no busca hacer un cambio de régimen en Irán».
