Las cajas rojas de la Guerra Civil
El hallazgo en un aparcamiento de unas "cajas rojas" con 5.000 fotografías sobre la Guerra Civil del fotógrafo Antoni Campañà ilustran ahora un libro y muestran la vida cotidiana entre 1935 y 1940. Unas fotos, han dicho los editores, que "huyen de la épica" de otros creadores, como Capa o Centelles. El historiador de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) Arnau Gonzàlez Vilalta, editor de "La capsa vermella" (La caja roja, editorial Comanegra), junto con el reportero Plàcid Garcia-Planas y el fotógrafo David Ramos, ha explicado en una entrevista con Efe que "Antoni Campañà, que era sobre todo conocido por sus fotografías deportivas o turísticas, ocultó después de 1939 estas fotos en un garaje que se había construido en los años 40 en Sant Cugat".
"Nunca quiso mostrar estas fotos y, de hecho, poco antes de morir en 1989 La Caixa le dedicó una exposición y solo enseñó entonces dos fotografías de la Guerra Civil", comenta Gonzàlez Vilalta, que asegura que "nadie, durante casi ochenta años, vio este inmenso archivo".
Treinta años después de su muerte, la familia decidió vender la casa de Sant Cugat y uno de sus nietos quiso visitar el aparcamiento por si había documentación de su abuelo y encontró las cajas rojas con placas de vidrio, copias y negativos. "Un tesoro desenterrado como si fuera el sueño de un arqueólogo que se salvó 'in extremis'" y cuya importancia acabaron constatando los editores del libro, que consideran que "es un fondo tan interesante como los de Centelles o Brangulí".
A pesar de la humedad y el moho, el material está bien conservado, y el interés de la familia, relata el historiador, es donarlo a una institución, sea un archivo o un museo, que lo "restaure, digitalice y divulgue, y no lo deje arrinconado en una estantería".
El "olvido" al que el propio fotógrafo condenó a sus fotografías de la guerra se explica, según Gonzàlez Vilalta, porque "la experiencia del conflicto lo dejó traumatizado y nunca quiso explotar comercialmente sus fotos, en el fondo, por que no era un fotoperiodista".
En su doble condición de catalanista y católico, algunas fotos de Campañà (Arbucias, Girona, 1906- San Cugat del Vallés, Barcelona, 1989) fueron utilizadas por la CNT-FAI y en los años 40 por ciertas publicaciones falangistas.