Víctor Clavijo: «El reto que tenemos los actores es llegar a pagar el alquiler»
«No existe el crimen perfecto, sino una mala investigación», afirmaba en alguna ocasión Hitchcock, el maestro del suspense. Y razón no le faltaba. Si bien es cierto que ahora hay una gran oferta de 'true crimes' resueltos, los casos fallidos en los que no ha quedado resuelto quién ha sido el asesino escasean. El crimen de los Galindos fue uno de los sucesos que más sacudió a la España de los 70 por la situación extraña que se respiraba tras la reciente muerte de Franco y la singularidad del caso. Cinco muertos en una misma noche. 50 años después sigue sin haber un culpable. Pruebas contaminadas y una desastrosa investigación que dio lugar más tarde a la creación de las unidades de policía judicial y posterior UCO en la guardia civil enturbiaron todo el trabajo. Sin embargo, el crimen de Los Galindos se resuelve en la serie 'El Marqués', la nueva miniserie que se estrena pronto en Telecinco . Y aquí entra en acción Víctor Clavijo, que protagoniza la serie e interpreta a Rafael Pertierra de Medina, Marqués de Bahía y Sobrarbe y dueño del lugar de la tragedia. «La serie es un espejo de las dos Españas que empezaban a colisionar una frente a la otra. La España inmovilista, que representaba el franquismo y la España nueva que empujaba, que era la España de la democracia». indica el actor a ABC. El gaditano lleva más de media vida frente a una cámara. «Nunca son buenos tiempos para los actores. Mi profesión tiene un 90% de paro», lamenta el actor. Aunque se considera un afortunado en este momento de su carrera, el actor reconoce que su trabajo es muy complicado. «Vivimos un buen momento los actores que por suerte trabajamos y para los que les toque trabajar siempre en cada época del año, pero es muy fuerte el paro que hay». Además, asegura tener a mucha gente a su alrededor en paro desde hace años. «No te hablo de meses, te digo años, y es algo que me preocupa muchísimo. Me duele tener compañeros en esa situación». Sí, hay ficción y producción, pero no un reparto equitativo. «Las productoras no deberían olvidarse de algunos actores que llevan tiempo sin trabajar. No sé cuál es el sistema para que baje un poco ese nivel tan preocupante». En los últimos años la situación de los actores ha tratado de mejorarse a través del establecimiento del Sindicato del artista, aunque Clavijo reconoce que no es suficiente. «Siempre se puede hacer más. Nuestro oficio cuenta con muchas particularidades y tiene cosas muy distintas a otras profesiones como la intermitencia laboral». Aunque la conciencia de los políticos es necesaria, también lo es en la industria. «Creo que el asunto pasa por crear un tejido industrial que garantice más ofertas laborales, más trabajo para más actores están lamentablemente en el bar y sin recibir ningún tipo de ofertas». La irrupción de las plataformas, la introducción de la inteligencia artificial, la nueva forma de consumir series y cine… Son muchos retos de golpe para un actor, aunque Clavijo asegura que el suyo, como el de otros compañeros, es otro. «Nuestro reto es pagar el alquiler el mes que viene. Es el mayor reto y no bromeo con ello», asegura. Ante los precios que indica, el actor reconoce que aquel que gana cincuenta euros en una función o cien euros, si tiene suerte, es un afortunado. «Pero quien trabaje en una compañía pequeña o independiente y solo tenga una función al mes en un pueblo, pídele que pague el alquiler… Verás que no puede», indica. Un reflejo de las dos Españas El actor reconoce que la serie no se centra tanto en mostrar un suceso (se basa más en la ficción), sino en plasmar un retrato de los 70. «Es un espejo de las dos Españas que empezaban a colisionar una frente a la otra. La España inmovilista, que representaba el franquismo y la España nueva que empujaba, que era la España de la democracia». Clavijo recuerda el caso desde pequeño. «En mi infancia todavía coleaba el caso de vez en cuando. En televisión había algunos reportajes informativos, incluso en Informe Semanal». Siempre ha tenido una clara conciencia sobre este asunto, así como el de los Urquijo: «Marcó un poco la crónica negra de la España en los años 70 y al de los hijos de los 80».