Un grupo aproximado de 80 trabajadores laborales que desarrollan su labor en la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, cuya plantilla cuenta actualmente con unas 400 personas, ha pasado a la acción y ha llevado a los juzgados la situación de temporalidad que vienen sufriendo con la concatenación de contratos desde hace muchos años, incluso décadas. En algunos casos desde el año 1990.
Este grupo de interinos conformado por arquitectos, aparejadores, ingenieros, abogados o delineantes, ha presentado, a través del letrado Marcos Peña, dos demandas colectivas y tres individuales ante los juzgados de lo Social de Sevilla. Fuentes consultadas por ABC señalan que existen otras demandas interpuestas en representación de otros trabajadores.
La primera demanda engloba a 34 trabajadores y ya está en el Juzgado de lo Social número once de Sevilla. Las individuales en el número tres. La otra demanda colectiva, que se encuentra aún en reparto entre los órganos judiciales de lo Social, aglutina a31 empleados.
La administración pública, a diferencia de la empresa privada, no puede de motu proprio hacer fijo a su personal salvo por oposición pública. Si bien, la jurisprudencia ha definido la figura del «indefinido no fijo» para los laborales.
Precisamente, los 34 trabajadores laborales, que son laborales interinos por virtud de una Oferta de Empleo Público del año 2009, reclaman que la Gerencia de Urbanismo los declare «indefinidos no fijos». Mientras, el grupo de los 31 empleados ha optado por basar su demanda en una cuestión aún a dilucidar por los tribunales europeos en base a una cuestión prejudicial planteada por dos juzgados de Madrid en materia laboral.
Las demandas fueron presentadas en las primeras semanas de este año 2019. En la primera de ellas, la que hace referencia a los 34 trabajadores laborales interinos y a la que ha tenido acceso este periódico, se expone la situación «de temporalidad y concatenación contractual fraudulenta» que padece este grupo de empleados desde mucho antes de 2009, como es el caso de una arquitecta técnica contratada por primera vez en 1990 y que ha acumulado casi una veintena de contratos y prórrogas.
La propia Gerencia de Urbanismo, en 2009, reconocía en un informe la alta tasa de temporalidad en su plantilla
En la misma demanda se recoge un informe de la propia Gerencia de Urbanismo con fecha de enero de 2009 en el que reconoce «la alta tasa de temporalidad que padece la Gerencia, que se agrava por la extensa duración de algunos de estos contratos». Esto es, Urbanismo admite en 2009 la alta temporalidad que padecía la plantilla, y que aún persiste. Entonces, la temporalidad en la plantilla de la Gerencia de Urbanismo, un organismo autónomo considerado administración pública, según las fuentes consultadas por ABC, ascendía al 30 por ciento del total de trabajadores. Actualmente, podría ascender al 40 por ciento. La norma estatal sólo permite que la administración pública cuente con un ocho por ciento de su plantilla en esta situación.
«La actual situación vulnera los más elementales derechos laborales» de los demandantes y «se ha vuelto insostenible», por lo que no les ha quedado más remedio que acudir a la vía judicial y denunciar «la situación temporal y de precariedad que padecen».
Entre sus alegaciones:el incumplimiento del artículo 70 del Estatuto Básico del Empleado Público. Tras exponer una extensa jurisprudencia, para el abogado está «claro» que los contratos de interinidad por vacante deben convertirse en indefinidos no fijos.
Fuentes municipales han precisado que esta situación de temporalidad de la Gerencia es «un problema histórico» y general de otras administraciones públicas, no específico en Urbanismo.
«Las necesidades permanentes de la Gerencia las ha solventado mediante interinidades por vacante, de forma indefinida, por lo que nos encontramos en un auténtico desvío de poder del Ayuntamiento, por cuanto utiliza su facultad de contratación para cubrir puestos permanentes con la utilización abusiva de contrataciones temporales», denuncian los trabajadores, quienes concluyen que su relación con la Gerencia «no es temporal, sino indefinida, debiendo ser considerados a todos los efectos como indefinidos no fijos, de acuerdo con la larga doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo».
La situación laboral que viven decenas de empleados de la Gerencia y que ahora ha llegado a los tribunales está provocando cierta tensión en la plantilla por las diferencias evidentes entre los empleados de este organismo municipal.
Una solución política
Según las fuentes consultadas por ABC, la situación fraudulenta en la que se encuentran estos empleados tendría una salida sin acudir a la vía judicial si el Ayuntamiento de Sevilla decidiera llevar a cabo un proceso para la regularización de los trabajadores temporales de larga duración mediante un concurso de méritos.
«La estabilidad del empleado público es un derecho básico de la dignidad de la persona». Además, esta consolidación de los empleados públicos por un concurso de méritos que respete los años de experiencia de estos trabajadores, igualmente, permitiría a la administración pública, en este caso el Ayuntamiento de Sevilla, llevar a cabo la funcionarización de estos indefinidos no fijos, lo que supondría que éstos pudieran asumir competencias y tareas exclusivas de los funcionarios, que en el caso de la Gerencia Municipal de Urbanismo son las más relevantes.
Precisamente, la Junta de Andalucía ya está trabajando en la elaboración de una ley de consolidación de funcionarios interinos por concurso.
