La Policía Nacional detuvo a un hombre en la localidad madrileña de Parla por agredir sexualmente a su madre, además de golpearla hasta desfigurarle el rostro. Los hechos ocurrieron la madrugada del pasado martes, 13 de agosto, cuando el individuo, de 56 años, llegó a su domicilio en el que convivía con su progenitora, de 76 años. El sujeto, en estado de embriaguez, forzó a su propia madre para que mantuviera relaciones sexuales con él. Ante la negativa de ella, la golpeó en repetidas ocasiones por todo el cuerpo.
Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, encontró al hijo tumbado boca arriba en la cama de una habitación con erosiones en los brazos y una herida en la frente. Además, también hallaron a la anciana, en un estado de «gran nerviosismo», aunque ella misma manifestó que su hijo había llegado borracho y con actitud violenta.
Los servicios sanitarios trasladaron a la víctima al Hospital Infanta Cristina de Parla mientras los funcionarios comunicaban al hombre que iba a ser detenido. En ese momento, el agresor se incorporó para, instantes después, desplomarse en el suelo por su estado de embriaguez. La Policía lo levantó y lo llevó al mismo hospital que su madre.
Según fuentes policiales, obligó a su progenitora a practicarle una felación. Como la víctima intentó resistirse después a la violación, la volvió a emprender a golpes contra ella. De esta manera, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Parla ha acordado la prisión provisional comunicada y sin fianza para el acusado. En principio, se le investigará por la supuesta comisión de un delito de agresión sexual y otro delito de lesiones cometidos sobre su madre.
Gritos de auxilio
La mujer se encontraba muy nerviosa cuando los agentes y sanitarios se personaron en su vivienda. Pero el calvario que vivió ya le resultaba familiar. No era la primera vez. Así lo aseguró la septuagenaria cuando fue trasladada al hospital. Según ha confirmado, su hijo ya la había agredido en otras ocasiones. La madrugada del martes, fueron sus gritos los que la salvaron, pues fueron escuchados por una vecina del inmueble, quien llamó inmediatamente al 091 alertando de los fuertes gritos de auxilio que profería una mujer.
Fuentes policiales señalan que el hombre contaba con antecedentes penales por los mismos hechos, que ya fueron denunciados por su madre. De hecho, fue encarcelado hace dos años, por otra agresión sexual a su progenitora, aunque finalmente ella retiró la denuncia. Ahora la ha puesto de nuevo.
