Jon Rahm pierde con Fowler en su debut en el mundial Match-Play
Jon Rahm llegaba al Mundial Match-Play con la incertidumbre de no haber podido concluir su última actuación de un modo positivo. Su retirada en el The Players debido a una gastroenteritis le impidió seguir con su magnífica racha victoriosa de 2023 en torneos Medal-Play, por lo que presentarse en Austin con un cambio de modalidad no era lo más recomendable. Y ante su primer enemigo, Rickie Fowler , mostró sus debilidades. Aunque le dominó desde el comienzo con dos hoyos de renta, en el hoyo 9 llevaba uno solo y le empató en el 11. Lamentablemente, ahí se le acabaron los súperpoderes y ya nunca volvió a ir por delante. El estadounidense, sin hacer un gran despliegue, se limitó a hacer lo suyo sin cometer fallos y se llevó el partido por 2 y 1. Y eso que este sistema de juego le gusta a Rahm, de eso no cabe duda; no hay más que verle disfrutar en la Ryder Cup y recordar su subcampeonato en la edición de 2017 ante Dustin Johnson. Lo que pasa es que no se sabía hasta dónde le iba a afectar la afección estomacal comentada y la presión de ser el último torneo que se va a celebrar de las Series Mundiales . Estos campeonatos comenzaron de cuatro en cuatro en 1999 con un segundo puesto de Miguel Ángel Jiménez ante Tiger Woods y un apoyo mediático y de jugadores encomiable. Había unas pruebas convencionales, otras mano a mano e incluso varias por parejas nacionales. Mas, con el tiempo, fueron languideciendo y la que hoy ha comenzado en Texas va a ser la última que se celebre. Como en ninguna de ellas ha vencido un español, la presión para el de Barrica es mayor, pues siempre busca añadir algún registro a su ya extenso palmarés. El formato para 2023 (tres días de grupos, con un cuadro el fin de semana al que pasan los mejores) hará que se mida consecutivamente a Fowler, Keith Mitchell y Billy Horschel con la esperanza de pasar el sábado a dieciseisavos de final en una parte del cuadro en la que se encontraría en semifinales a Rory McIlroy. Por la otra, la lógica colocaría a Scottie Scheffler contra Patrick Cantley. Pero ya se sabe que en el «Match-Play» puede pasar cualquier cosa y que los pronósticos no suelen cumplirse. Aquí no vale con hacer muchos 'birdies' sino que hay que ganar hoyos a los rivales; y esto se puede hacer también con 'bogeys' o dobles 'bogeys'. El juego mental sirve más que nunca y la intimidación en el cara a cara hace que muy a menudo se gane incluso jugando mal. MÁS INFORMACIÓN noticia No Jon Rahm abandona el The Players por enfermedad Pero lo habitual es que si no se juega a un buen nivel se pierda. Ese fue el caso de Jon, que tuvo una última parte del recorrido muy fallona y le cedió a Rickie una iniciativa que no desaprovechó. Ahora, con una derrota ya en su casillero, el español se complica la vida en este torneo al no tener ya margen de error. Por eso no pudo disfrutar del día en el que se le concedió el Premio Nacional del Deporte, que le entregará el Rey el próximo 18 de abril. Recién conocida la noticia, todavía no ha confirmado si podrá acudir al Palacio de El Pardo a recogerlo. Es después del Masters y Harbor Town y, aunque esa semana la tiene libre al no competir en el dobles de Nueva Orleans, a la otra defiende título en México. En fin, que deberá revisar su calendario para decidirlo y antes sacar su mejor juego para no acabar antes de tiempo en el último Match-Play de la historia.