Cuando aún resuena el bofetón de Will Smith, el debate sobre los límites del humor se traslada a Mallorca, donde el Institut Balear de la Dona (IBDona) ha tenido que retirar una viñeta de una exposición en la que se mostraba a un juez en clara actitud machista. El dibujo, que forma parte de una muestra de la autora argentina Diana Raznovich, muestra a un magistrado diciéndole a una mujer magullada que cómo va a maltratarla su marido si ella está viva. El IBDona insiste en que tiene tono humorístico, pero a los jueces no les ha hecho ninguna gracia. Tanto es así que el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB), Carlos Gómez, ha trasladado su malestar al Govern y el ejecutivo de la socialista Francina Armengol ha optado por eliminar la viñeta, que se exhibía hasta ahora en la Estación Intermodal de Palma.
«Todos los poderes públicos estamos sometidos a la crítica y no entiendo una interpretación que pueda ser ofensiva si se toma como humor gráfico», defendió la directora del IBDona, Maria Durán, que aseguró que esta campaña, englobada en los actos del 8-M, no era contra nadie sino que sólo quería «sensibilizar».
En su presentación, la consellera de Presidencia, la socialista Mercedes Garrido, hizo un llamamiento a toda la ciudadanía a visitar la exposición porque era «una manera original y diferente de llegar a diferentes tipos de público».
Fue la semana pasada cuando Vox lo denunció y pidió explicaciones directamente a Garrido en el pleno del parlamento balear y calificó de «bochornosa e indignante» esta exposición feminista al considerar que «criminaliza al varón y se burla de los jueces».
Garrido respondió que el Consejo General del Poder Judicial «era el primero que en enero de este año, con su observatorio, hizo un paso adelante y pidió la modificación de la ley, precisamente para adaptarla al Convenio de Estambul para entender la violencia de género más allá del ámbito de la pareja».
