El Ayuntamiento de Barcelona se ha puesto, una vez más, al lado de los movimientos soberanistas este martes coincidiendo con el inicio del juicio sobre la cúpula del "procés". Dos días después de que el consistorio acogiera un acto masivo de alcaldes para reclamar la libertad de los líderes independentistas encarcelados, el gobierno municipal encabezado por la alcaldesa Ada Colau ha encabezado junto a Elsa Artadi el paro de cinco minutos en Sant Jaume junto a la Generalitat.
Colau anunció hace días su intención de acudir a alguna de las sesiones del juicio pero este martes se ha quedado en Barcelona, donde, coincidiendo con la festividad de Santa Eulàlia, patrona de la ciudad, tenía varios actos institucionales. Tras asistir al paro reivindicativo la alcaldesa ha considerado que la de la situación política en Cataluña es que los dirigentes independentistas presos salgan de la prisión: "La única forma de salir de aquí es desjudicializar, que la gente salga de la cárcel, y que se retome el diálogo y la negociación".
Lejos de la equidistancia, Colau ha lamentado que se trata de un día triste por ver en el banquillo de los acusados a dirigentes que acumulan "injustamente un año de prisión preventiva", en un proceso judicial lleno de anomalías, con peticiones de penas elevadísimas y acusaciones infundadas, porque en Cataluña ha habido conflictos y diversidad de opiniones pero no violencia, en sus palabras recogidas por Ep. Junto a ella, se han manifestado parte del equipo de gobierno así como miembros de las formaciones independentistas municipales.
Por el contrario, el teniente de alcalde de Ciudadanía en el Ayuntamiento, Jaume Asens, sí que ha acudido a Madrid a arropar a los líderes que desde hoy son juzgados. A las puertas del TS ha lamentado que el juicio representa el fracaso de la política y ha exigido "las máximas garantías ante un Tribunal dañado y desligitimado".
"Los hechos se están interpretando como un ataque gravísimo al orden constitucional, pero en el resto de Europa se ven como hechos políticos sin ninguna relevancia penal, como ha dicho ya el tribunal alemán. Estamos ante el espejo de Europa, lo que está en juego también es la calidad democrática de nuestras instituciones", ha asegurado a Ep. Para Asens, "la unidad de España se tiene que proteger por otros medios políticos, no haciendo una interpretación extensiva y abusiva de delitos" como en su opinión, ocurre en este caso. "Lo que suceda estos días va a ser determinante para el futuro no solo de Cataluña sino del Estado, el derecho, las libertades y la convivencia", ha apostillado.
Críticas de la oposición por el partidismo municipal
El posicionamiento del consistorio de esta mañana, el enésimo que acumula en referencia al proceso independentista, ha indignado una vez más a parte de la oposición. Especialmente, ha molestado el hecho de que la dirección técnica de actos institucionales y protocolo del Ayuntamiento haya convocado a los empleados municipales, inclusive los concejales de la oposición, a parar durante cinco minutos bajo el lema "La autodeterminación no es delito".
"Colau vuelve a sumarse a las movilizaciones separatistas y a utilizar el Ayuntamiento como instrumento de presión a la justicia. #NoEnMiNombre", ha lamentado la líder de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Carina Mejías, que ha reiteado que la alcaldesa "desprestigia a la justicia, se suma a las manifestaciones de presión a los jueces y se manifiesta junto a los separatistas y sus gritos de independencia".
Desde el PP, su presidente municipal Alberto Fernández se ha referido al delito que mencionaba el lema de la convocatoria y ha asegurado que "ser independentista no lo es, pero se convierte en delito cuando para conseguir la secesión d Cataluña te saltas leyes y desobedeces tribunales". "No se juzga por ideas, sino por actos", ha recordado el líder popular.
Por su lado, Jaume Collboni, el candidato del PSC en las próximas municipales, ha asegurado que hoy es un "día triste" porque el juicio es "la constatacion del fracaso de la política de los gobiernos de Rajoy y Puigdemont". Así, ha abogado por el diálogo, respeto a las leyes y a quien piensa diferente y defensa de la convivencia.
