Ramón Hernández, sobre su despido: “Faltó comunicación con la gerencia”

Ramón Hernández llegó a Maracay, donde se encuentra la sede de su academia RH Sports, para reunirse de nuevo con su familia, tras ser depuesto por los Tigres de Aragua en la última gira que el club tuvo por Puerto La Cruz, donde dividió honores contra Caribes antes de entregarle el mandato de los bengalíes a Óscar Salazar.

“Ha sido bastante difícil”, admitió el ex receptor en una conversación telefónica. “Yo nunca hubiera esperado que me fueran a botar tan rápido. La organización sabía que podíamos competir, pero no que íbamos a estar de primeros. Empezamos con muchos muchachos jóvenes y a la larga, cuando la temporada va avanzando, la liga se va apretando un poco más”.

El caraqueño, criado en Cumaná, fue removido de su puesto después de conseguir diez triunfos en veinticuatro compromisos y ubicarse séptimos en la clasificación de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, al término de la amplia jornada dominical que incluyó siete partidos por primera vez en la historia.

“Me agarró por sorpresa porque pensé que estaba haciendo bien mi trabajo”, agregó Hernández. “En mi carrera siempre he tratado de hacer lo mejor y en esta ocasión ellos piensan que me equivoqué. No creo que uno pueda saber si un mánager es bueno en solo un mes, pero entiendo que los equipos se desesperan por cuanto el torneo es muy corto”.

El ex pelotero recibió su libertad por parte de Luis Márquez, gerente deportivo de los felinos, quien le aseguró que la orden era de alta gerencia de los rayados, quienes no se comunicaron con el estratega saliente.

“Creo que faltó comunicación directa con la gerencia del club”, añadió. “Hubiera querido que me dijeran si estaban contentos o no con mi trabajo y hablar un poco más claro, en vez de mandarme a decir que no estaban contentos conmigo. Yo creo que tal vez ellos no estuvieron seguros de mi contratación porque soy muy joven, a pesar de que bastante béisbol he jugado y compartido, incluso con el presidente de los Tigres”.

Hernández realiza su evaluación y explica que atravesó momentos complicados con las lesiones de figuras como Guillermo Moscoso. El roster, además, estaba compuesto con muchos peloteros que estaban viendo acción por primera vez en la pelota rentada nacional.

“Tenía dos o tres abridores enfermos, al igual que unos relevistas y teníamos un núcleo muy joven”, expuso. “Ningún mánager quisiera pasar por esto, pero era algo que escapaba de mis manos”.

Sin embargo, disfrutó la experiencia por cuanto era su primera travesía al mando de un club profesional, un sueño que tenía desde hace tiempo y que, aunque fue breve en esta oportunidad, le permitió aprender los gajes del oficio.

“Estoy agradecido con la oportunidad, aunque sea un mes, porque hice algo que quería hacer”, concluyó. “Esta experiencia me enseñó mucho, como persona y como estratega del juego. Le saqué el mayor provecho posible porque tenía el sueño de ser mánager. Doy las gracias por la oportunidad”.