Mi patria son dos lenguas
El Gobierno de Torra, empeñado en que los ciudadanos pierdan un idioma y una cultura que nos es propia, quiere imponer el catalán como lengua única
Quizás por una repentina nostalgia de mis comienzos periodísticos, en los que me convertí en la primera mujer que entró en el vestuario del Barça (entre los gritos de Cruyff y el susto de jugadores que se tapaban como podían), decidí ver hace unos días el reportaje conmemorativo de la Recopa del Barça en Basilea. Se cumplían 40 años. Con su pelo blanco, renqueantes de tanta patada recibida, aparecían tres ídolos de mi juventud, Asensi, Reixach y Sánchez. Orgullosos de sus correrías, recordaban aquella época. Reían y hablaban, sin pelos en la lengua, entremezclando catalán y castellano.