La mesa de Azaña vuelve del exilio
España recupera en Francia el escritorio en que el presidente firmó su renuncia como jefe de Estado de la República en febrero de 1939
Un sencillo escritorio, con bordes de cobre, motivos florales y patas entrelazadas, encierra el amargo final de Manuel Azaña y de todo el periodo de la República española. La mesa de madera en la que el presidente republicano firmó, desde su exilio francés, la renuncia al puesto cuando la Guerra Civil estaba sentenciada reaparece tras 80 años en el olvido. El tesón de un ciudadano francés empeñado en preservar ese retazo de memoria histórica permitirá al Gobierno español recuperar un mueble que simboliza el fin de un periodo interrumpido abruptamente con el golpe militar de Franco y la dictadura que siguió.