«Vitruvio describe un ariete cartaginés con el que fue destruida una antigua muralla gaditana»
Ninguno, al contrario, hablar de este arquitecto es todo un placer para mí.
Creo que se interesó por este arquitecto viendo en Roma el Panteón de Agripa.
El interés y el impacto que me provocaron el edificio me hizo ponerme a estudiarlo y, para ello, me fui al Tratado de Vitruvio que es la base del conocimiento de la arquitectura romana. Originalmente se titula De Architectura.
¿Hay algo parecido a esa cúpula del Panteón en Andalucía?
Le daré una alegría. Hay una reproducción del Panteón a escala menor, con una bóveda de 30 metros, que es una iglesia en Montefrío, Granada.
Tengo entendido que en Lugo hay un arquitecto que tiene una teoría sorprendente sobre Vitruvio…
Este compañero ha hecho una tesis doctoral en la que concluye que Vitruvio era el seudónimo de Marcos Agripa, íntimo amigo de Augusto y promotor de muchas obras civiles en el imperio, como por ejemplo el teatro de Mérida. No creo que lleve mucha razón.
Es curioso la fama y prestigio que tiene Vitruvio. Se puede decir que es el único arquitecto que pasó a la gloria sin haber levantado un solo edificio.
Dice que levantó una basílica en Fano, pero hay historiadores que consideran que los restos no coinciden con la descripción que da Vitruvio en el Tratado, sí con otra de un pueblo cercano llamado Ordona.
Pero la vida es pura paradoja. Sin su tratado recopilatorio de la arquitectura de su tiempo no habría sido posible el Renacimiento.
Así es. El de Vitruvio es el único tratado de la antigüedad clásica, tanto griega como romana, que ha llegado hasta nosotros. La impresión del Tratado y su publicación hacia 1476, suscitó un gran interés entre los arquitectos que, de alguna forma, descifraban las claves de las ruinas romanas que aún tenían ante sus ojos.
En cambio fue un muy valorado arquitecto militar…
Fundamentalmente hizo maquinaria de guerra para César y para Augusto.
Se puede decir que fue el cerebro de la maquinaria de guerra pesada de Julio César. ¿Consta que lo acompañara en su campaña en Hispania?
Vitruvio habla de un ariete que hicieron los cartagineses para derribar una muralla en Cádiz. No sabemos si se enteró de esta noticia en una visita con César a Cádiz o, simplemente, se pudo enterar durante sus estudios de arquitectura.
Tengo entendido que la obra de Vitruvio sirvió de manual operativo para los inspectores y promotores de obras en la Roma clásica.
Sí, hoy sería algo así como el manual para los responsables políticos que no son técnicos, pero su función es contratar y recibir obras. Hoy se suple con asesores afines.
Digamos que no levantó edificios, pero sí casi todos los que se levantaron miraron en su obra…
Más exactamente lo que pretende Vitruvio es que quede para la posteridad un manual de arquitectura de cómo deben hacerse los edificios.
Demos un salto vertiginoso. Mies van der Rohe, que no es un futbolista holandés, es tan vitruviano como Miguel Ángel?
Si hay un arquitecto moderno que bebe en fuentes clásicas es Mies van der Rohe.
¿Y Le Corbusier?
Seguro que conocía perfectamente el Tratado. Pero quizás no refleje tan claramente la arquitectura romana como hace van der Rohe.
Hay edificios de la moderna arquitectura que son la síntesis expresiva de una columna de orden clásico, con basa, fuste y capitel, con proporciones muy vitruvianas. ¿Se acuerda de algunos?
Sin duda el rascacielos del Seagram building de Nueva York.
Hablamos y hablamos y aún no le he preguntado por su tesis.
La tesis se llama ‘Descifrando a Vitruvio’ y he querido poner en orden la disparidad numérica que existe entre las distintas tradiciones del tratado. Las traducciones son distintas según el manuscrito de base que se copió en su día por amanuenses en abadías medievales. Con todos los errores acumulados en las sucesivas copias.
Usted es sobrino de uno de los genios del humor del siglo XX: Tip. Creo que alguna vez se vistió de romano.
(Risas) Sí, sí, en alguna película lo llegué a ver vestido de romano.
Lo mismo me equivoco. Pero no lo veo escuchándole la lectura de su tesis…
(Risas) Si le leo la tesis me habría mandado muy lejos o sobre la marcha se hubiera inventado la vida de Vitruvio.
Los errores de los copistas
Se quedó ojiplático cuando vio por vez primera el panteón de Agripa. Y decidió escribir un libro para explicárselo. El texto cayó en manos del arquitecto Paco Granero, profesor de la Escuela, que lo animó a que lo convirtiera en tesis. Cinco años de investigación y sesenta láminas dibujadas por el autor componen este trabajo que trata de poner un poco de orden en la numerosa discordancia que existe entre el Tratado original y lo que transcribieron los copistas medievales. Carlos Sánchez-Polack estudió en Sevilla, vivió entre nosotros hasta los años ochenta y ahora disfruta de Cádiz. Le encanta la Fábrica de Tabacos y le da cierto repeluco la Sevilla de la ES-30. Sobrino del genial humorista Tip, guarda anécdotas geniales que darían para otra tesis.